Ese día la jovencita se siente sexy. Con 18 años, es lo más normal para cualquier jovencita y esta asiática se desnuda frente un fotógrafo. Este puede capturar ese momento y ahora todos podemos ver sus tiernas tetas pequeñas.
Una maravilla de la tecnología, la putería y la revolución de zorritas. Algo que seguramente no vieron antes y que en el futuro, espero que sea mucho mejor. Que nadie diga que no es grato ver el coño de esta chica. Bien depilado o todavía no le salen. No le puedo preguntar.
Aunque pudiera, no creo que importe mucho. Estamos frente a una belleza de una de las partes más lejanas de Occidente y seguramente, con los mismos ojos que la vemos, vieron nuestros antepasados a sus ancestros mujeres. Porque las leyendas tienen que ser ciertas. Yo quiero creer.